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Membresía

Orientaciones para la membresía en la iglesia según el reglamento interno de la IHM-Concordia (2012) Capítulo 2: Membresía

2.1. Miembros

2.1.1. Personas serán admitidas como miembros de la iglesia de la siguiente manera:

  1. Al firmar el acta de Constitución de la Iglesia.
  2. Por el bautismo, luego de haber declarado la fe personal en Cristo.
  3. Por recomendación y certificado de membresía de otra iglesia menonita o de otras iglesias afines.
  4. Por un testimonio personal, después de una entrevista y un período de prueba, en el caso de que el solicitante no dispone de un certificado de membresía o una carta de recomendación, pero ha sido bautizado por su fe.
  5. La readmisión de un miembro separado previamente de la Iglesia, después de un verdadero arrepentimiento y una renovación espiritual.
  6. En caso de solicitudes de admisión consideradas especiales, las mismas serán estudiadas y tratadas caso por caso. En todos los casos el interesado deberá manifestar su fe en Jesucristo mediante un testimonio público ante la Iglesia.

2.1.2. Se considera que los miembros de la iglesia, se han asociado en forma voluntaria, sin embargo, cada miembro contrae una relación comprometida y vinculante con la iglesia y aceptará su credo, su estatuto y reglamento interno, desde el momento en que es aceptado como miembro.

2.2. Miembros especiales

2.2.1. Miembros bautizados, que temporalmente se encuentran en el área de influencia de la iglesia y que desean participar activamente en las actividades de la iglesia y que reconocen el credo, pueden presentar al consejo de la iglesia la solicitud de convertirse en miembros especiales de la iglesia. Para la membresía especial, se invita principalmente a los misioneros o aquellos que han sido enviados para un servicio evangelístico o social y pueden presentar un certificado de membresía de su iglesia.

2.2.a. Miembros especiales pueden ocupar todos los cargos dentro de la iglesia excepto ser miembro del consejo de la iglesia y diaconía. Tienen derecho de voz y voto en todos los asuntos de la iglesia. Se integrarán completa y comprometidamente en la vida de la iglesia.

2.3. Terminación de la membresía

Esta se da por:

2.3.1.  Transferencia de la membresía a otra iglesia mediante un certificado de transferencia.

2.3.2. Si un miembro por algún motivo desea salir de la iglesia sin congre­garse en otra, esta situación debería ser analizada en forma pastoral. Una renuncia a la membresía se confirma por el consejo y se le comunica a la iglesia, pero será considerada como una terminación de la membresía. En estos casos no se le entregará un certificado de membresía.

2.3.3. Miembros que permanecen en pecado y no están dispuestos a con­fesar sus pecados y volver a Dios, después de un proceso de acom­pañamiento pastoral, por recomendación del consejo serán excluidos de la iglesia.

2.3.4. La muerte.

2.4.     Membresía comprometida

El ser miembro de la iglesia conlleva un carácter de compromiso. Con su admisión a la iglesia todos los miembros se comprometen a:

2.4.1. Participar activamente de las actividades de la iglesia.

2.4.2. Colaborar activamente, conforme a las capacidades y posibilidades de cada uno.

2.4.3. Contribuir financieramente al presupuesto de la iglesia de acuerdo con las reglas bíblicas y las posibilidades económicas individuales.

2.4.4. Asesorar y decidir responsablemente en las asambleas de la Iglesia, bajo la guía del Espíritu Santo.

2.4.5. Todos los miembros titulares tienen el derecho y el deber de asistir y participar con voz y voto en la Asamblea Ordinaria y Asambleas Extraordinarias.

2.4.6. Todos los miembros titulares tienen el derecho de ser elegidos para los cargos dentro de la iglesia.

2.4.7. Reconocer efectivamente la autoridad bíblica de la iglesia en asuntos de doctrina, fe, ética, así como las decisiones tomadas por la iglesia.

2.4.a.   A miembros que se mudan a otra localidad se recomienda congregarse allá dentro de un año en una iglesia cercana. En el caso de estudiantes, misioneros u otros miembros enviados por una iglesia y comunicado oficialmente a la iglesia se puede llegar a un acuerdo especial. 

2.A. Disciplina en la iglesia
  1. El consejo de la iglesia, con la ayuda del consejo de predicadores, es responsable en los casos de consejería espiritual y de disciplina en la iglesia.
  2. Dado que la mayoría de los casos de disciplina son muy complicados y deben ser tratados con mucha discreción. Por un lado, se aplicarán las instrucciones bíblicas y por otro lado se proporcionará la asistencia espiritual necesaria.
  3. En casos donde se opta por la separación de un miembro se informa a la iglesia. El consejo de la iglesia da la recomendación para su separación y los miembros confirman la misma.